2012/09/04

Preguntas

  1. ¿Es la realidad algo más que una conjunto de leyes sintácticas aplicadas a la energía del big bang?
  2. Aparte de matemáticas, ¿que hay en la realidad?
  3. ¿Podemos acceder a la realidad, o las representaciones mentales y conceptuales que nos hacemos de ella son modelos demasiado alejados de lo real?
  4. ¿Costruimos la realidad, o la percibimos?
  5. ¿Puede el cerebro humano desvelar la realidad? (El de un perro no puede)
  6. ¿Puede el cerebro humano comprenderse a sí mismo (el de un perro no puede), o quizás el nivel de complejidad del cerebro humano excede su capacidad de raciocinio?
  7. ¿Es la experiencia estética una mera emoción?
  8. ¿Qué papel juegan las ideas en la experiencia estética, sea de lo bello, lo sublime o lo trascendente?
  9. ¿Tienen los animales acceso a la experiencia estética? ¿Pudiera ser que sintieran la emoción de lo bello, con total ausencia de acompañamiento conceptual?
  10. ¿Nos dice la experiencia estética (lo bello, lo sublime, lo trascendente) algo sobre la realidad?
  11. ¿Por qué el hombre le busca sentido a la vida?
  12. ¿Tiene la vida sentido, o lo creamos nosotros?


2012/09/02

Amistad

Alicia Gutiérrez Jodrá: "Los amigos son los hermanos que elegimos".

La amistad es un fenómeno netamente humano o, desde luego, característico de los mamíferos muy encefalizados (digo esto porque no sé si los primates superiores, los delfines o los elefantes muestran signos de comportamientos amigables en sentido estricto). Si, conforme a Dawkins, la evolución es la aparición de estructuras cada vez más complejas que permiten la transmisión de la herencia genética de forma más eficiente de generación en generación, la amistad es evolutivamente cuestionable, por no decir inútil. Los entendidos dicen que el homo sapiens, comparado con el Neanderthal, era capaz de desarrollar comportamientos sociales más sofisticados, que nos premitieron construir sociedades más extensas y mejor capacitadas para adaptarse al entorno, basadas en la colaboración. Pero la amistad es más que eso. Colaboro con muchas personas cada año, de las que no me hago amigo.

Modestamente, he desarrollado un modelo para explicar la dinámica de la amistad. Depende de dos ejes. Un eje da cuenta del atractivo que las distintas personas ejercen sobre una dada. No me refiero a atractivo sexual, sino a atractivo general, a lo interesante que una persona le parece a otra. El otro eje da cuenta del cariño. Para una persona dada, la mayor parte de la humanidad no  es atractiva (en parte porque es desconocida) ni resulta querida. La magia de la amista empieza por el atractivo. De repente, en el trabajo o en el colegio, algunas personas nos resultan interesantes, atractivas. Muchas veces ese atractivo se basa en la afinidad, incluso en la complicidad. Si, como consecuencia de ese atractivo, las personas empiezan a frecuentarse, del roce surge el cariño. Y ese el momento cumbre de la amistad. Una relación de afinidad y complicidad aderezada por el cariño.

En ocasiones, algunas personas que han sido interesantes y queridas dejan de ser atractivas para nosotros. Ocurre muchas veces con los amigos de la adolescencia que, al reencontrase, se extrañan, no son capaces de reactivar la corriente de afinidad. Queda el cariño, pero ya no propiamente la amistad. Haríamos cualquier cosa por el amigo de la juventud que ahora nos parece un marciano, pero no saldríamos a cenar con él todas las semanas. Ya no reconocemos en él al amigo.

Hay veces que con los hermanos ocurre algo similar. El amor que se profesa a un hermano es inmenso; si la vida no ha arruinado la relación, no hay nada que no haríamos por él o ella... aunque pensemos que, en realidad, no tenemos nada que ver con la persona que es.

En una película de mi juventud, "Maravillas", la protagonista citaba a alguien que no recuerdo diciendo: "morimos como nacimos... solos". La amistad mitiga nuestra soledad ontológica. La afinidad que está en el corazón de la amistad nos hace sentir que no estamos tan solos, que en la frialdad del universo material alguien piensa como nosotros, siente como nosotros, nos quiere y nos cobija, es capaz de tomar partido por nosotros, nos justifica, nos comprende, nos acoge, forma parte de nuestra vida y nosotros de la suya, está ahí para reir con nosotros, para llorar con nosotros, para preocuparse con nosotros, para ser un poco familia de nuestros hijos, para que nosotros lo seamos de los suyos.

La amistad es nuestra vida vivida por otros, nosotros viviendo otras vidas. Cerebros que piensan juntos, corazones que laten al unísono. Descubrimientos hechos al tiempo, espíritus que se conforman de la misma manera, revelaciones compartidas, decepciones simultáneas.

La amistad es una danza a dos, a tres o en grupo, en la que los movimientos se coordinan sin preparación o ensayo. Por eso no es infrecuente que, algunos de los que danzan con nosotros se desacompasen (o nosotros nos desacompasemos con ellos). Y por eso, cuando esa danza dura años y años y nos acompaña durante la vida entera, un sentimiento de plenitud y gratitud nos embarga.

Hoy me siento agradecido.

2012/08/12

Innovación

La semana pasada visitamos la Fundación Calouste Gulbenkian en Lisboa. Calouste Gulbenkian fue un empresario turco, de origen armenio, educado en Gran Bretaña, pionero de la industria del petróleo en el Oriente Medio a principios el siglo XX. Merced a sus habilidades de gestión, Gulbenkian consiguió asegurarse el 5% de todo lo facturado por las cuatro princiales compañías que explotaban los recursos petrolíferos del actual Irak... amasó una ingente fortuna.

Solucionado el problema de la generación de recursos, Gulbenkian pasó a ocuparse de la cuestión que de dicha solución se deriva: la aplicación de dichos recursos. Como amaba el arte, reunió una impresionante colección, de la que se rodeó en su mansión parisina. Dos cuadros de Rembrandt de primer nivel, un Ghirlandaio maravilloso, dos Degas, una impresionante colección de arte egipcio, arte chino, arte medieval europeo... convirtieron su residencia en una suerte de museo habitado.

La llegada de la Segunda Guerra Mundial forzó a Gulbenkian a cambiar de aires, y acabó instalándose en Lisboa, donde vivió durante quince años en un hotel, hasta que fijó su residencia en una vivienda en el solar que en la actualidad alberga los edificios de la fundación que lleva su nombre. En reconocimiento a la acogida que Lisboa le brindó, Gulbenkian cedió su colección de arte a la ciudad, en la que, tras haber trasegado por Londres y Nueva York, recaló en 1969, una vez se edificó el hermoso y racionalista museo de la fundación.

La Fundación es una maravilla, especialmente por la colección, pero también por los edificios, sobre todo los dos primeros, que conservan toda la belleza austera de la arquitectura del movimiento moderno. En una anterior visita, en 1985, vi por vez primera arte egipcio, arte chino, cuadros de Rembrandt (al menos cuadros importantes de Rembrandt)... A pesar del riesgo de sobrevaloración en el recuerdo, esta segunda visita me ha dejado el mismo sabor de boca.

Pero en fin, después de esta introducción casi a modo de cuaderno de viaje, vamos al tema. Y el tema surge de la visita a la sala de arte egipcio de la Gulbenkian. La sala contiene piezas que van desde el año 1.300 hasta el 250 A.C. Un milenio. Y sin embargo, sorprende la homogeneidad de la forma. Seguramente los expertos en arte egipcio (en el improbable supuesto de que alguno acabe leyendo esta nota) me corregirán, pero el arte egipcio parece "intemporal", en el sentido de que su apariencia es muy similar a lo largo del tiempo. Hay dos esculturas de sendos bustos, separadas por mil años, con una apariencia muy semejante.

En un periodo de tiempo similar, al arte griego le dio tiempo a surgir, crear tres órdenes arquitectónicos, alcanzar la perfección en la escultura y darle el relevo a los romanos. En la Europa occidental, entre el año 1.000 y el 2.000 de nuestra era pasamos del pantocrator a Pollock, y de las iglesias románicas a Notre Dame du Haut en Ronchamp. Los egipcios, en 1.000 años, por lo que pude ver en la Gulbenkian, pasaron de la representación frontal hierática a la representación frontal hierática, aún a riesgo de simplificar.

Me lleva esto a pensar en la sociedad egipcia como si hubiese alcanzado, relativamente pronto en su desarrollo, un cierto estado de estatismo, de congelación, en el que el cambio era muy lento, casi imposible. Y en esta ausencia de innovación creo yo que estaba sembrada la semilla de la desaparición de la cultura egipcia.

La historia de las culturas, de las civilizaciones, está sometida a la lógica evolucionista. Las distintas sociedades evolucionan adaptándose a un entorno en el que, desde el momento en el que surge la escasez, están sometidas al riesgo de desaparición. Los nearthentales vivieron muy cómodos en Europa durante 400.000 años, hasta que algunos cambios climáticos y nuestra llegada, compitiendo por la misma posición en el ecosistema de entonces, acabaron con su extinción.Y la secuencia histórica de aparición y desaparición de imperios (sociedades que son capaces de constituirse en potencias hegemónicas a escala regional o global) no es sino la expresión de la potencia de nuevas ideas, de nuevas formas de organización y de concepción de las sociedades, que acaba por agotarse cuando se extingue la capacidad de dichas sociedades de innovar y el entorno se ha transformado más allá de un punto a partir del cual las viejas ideas ya no sirven.

Volviendo al caso egipcio, en el milenio que va del año 1.300 al 300 A.C. asistieron a la guerra de Troya, a la formación de Atenas y Esparta, a la emergencia de los fenicios, a la explosión del arte y del pensamiento griegos, al ímpetu de Alejandro, a las luchas entre romanos y cartagineses por la supremacía en el Mediterráneo, a la imposición de la técnica civil y militar romanas, a la regulación de las relaciones sociales derivadas del derecho romano... Lo que valía en el año 1.300 A.C. no podía valer 1.000 años después.

El modelo de explicación de la evolución de las sociedades sería, de este modo, básicamente darwinista. Son las sociedades mejor adaptadas al entorno las que se imponen. El entorno está integrado por la sociedades con las que se compite. Esta competencia viene a su vez determinada por la dimensión en la que se establece (hegemonía militar, control de los recursos, hegemonía económica) y su intensidad, que depende a su vez de la escasez del sistema (escasez de recursos, escasez de territorios) y del grado de solapamiento de las sociedades: Roma nunca compitió con China (si bien el solapamiento puede ser más que geográfico: Roma y Cartago chocaron porque sus aspiraciones de dominio del Mediterráneo eran las mismas).

Del mismo modo que las mutaciones generan la variedad en los ecosistemas biológicos, la innovación genera la variedad en las sociedades. Sólo las sociedades con capacidad de innovación pueden adaptarse a entornos que cambian. Sólo las sociedades con capacidad de innovación pueden perdurar.

Y lo que hemos aprendido es que las sociedades, para innovar, necesitan que los individuos tengan un mínimo grado de libertad. Las sociedades excesivamente regladas por poderes de tipo teocrático o autocrático no innovan, no se transforman. Egipto parece una cultura congelada en el tiempo, en el que las cosas "son como son". El impulso creador de la Grecia de Pericles, Sócrates y Platón se congeló posteriormente, como le ocurrió al vendaval innovador de la República Romana al llegar al Imperio.

Nuestra sociedad actual se enfrenta a retos distintos. Es muy posible que, más que competir entre diferentes formas de dominio, la competencia principal sea contra los límites del sistema. Pero, si tengo razón, una cosa es cierta: la solución a nuestros problemas no va a venir de una regresión al pasado o de la perpetuación de formas de regulación de otros tiempos. La solución debe venir de nuevas formas de concebir nuestras sociedades, nuestras economías, nuestra relación con el ecosistema, incluso nuestra idea de humanidad. Será la innovación la que escriba el futuro. Y para que esto ocurra, hay que asegurar que los individuos gocen de la libertad de crear, de inventar, de discrepar, de contradecir, de ser excéntricos, de ser respondones, de ser distintos.

Hay que ver lo que da de sí una visita a un museo, ¿verdad?

2012/07/20

El bosón de Higgs

Después de una cuantas entradas de naturaleza un poco más mundana, volvamos a la línea dura del blog. El 4 de julio de 2012, los científicos del LHC del CERN y, en particular, los directores de los detectores CMS y Atlas anunciaron la detección, con un margen de error muy pequeño, del bosón de Higgs.

Seguro que ya todos han oído hablar o leído sobre el bosón de Higgs. Dentro el Modelo Estándar, que unifica la interacción electromagnética, la interacción débil (responsable de la desintegración de algunos átomos) y de la interacción fuerte (la que mantiene unidos a protones y neutrones en los núcleos atómicos), el bosón de Higgs es el responsable de dotar de masa a las partículas de materia, así como a algunas de las partículas mediadoras de las interacciones descritas (una partícula mediadora es la partícula asociada a un campo; por ejemplo, el fotón, la partícula que transporta la luz, es la mediadora de la interacción electromagnética).

El bosón de Higgs ha recibido la denominación de "partícula de Dios", porque en su ausencia el universo no sería como es. Sin masa, "todo" se movería a la misma velocidad que la luz y el tiempo desaparecería, además de que no habría átomos.

¿Cómo actúa el bosón de Higgs? Básicamente, el bosón de Higgs lleva asociado un campo de energía (como el campo gravitatorio o el eléctrico) que permea todo el espacio (esto significa que en cada punto del espacio hay un valor del campo de Higgs), como si fuese una sustancia pegajosa. Las partículas de materia (y algunas de las que median las fuerzas fundamentales) se "adhieren un poco" al campo de Higgs, en un efecto que dotas a dichas partículas de inercia. Ese efecto es la masa. Sin embargo, los fotones no se "pringan", es como si estuviesen enjabonados y no se ven afectados por la sustancia pegajosa.

Para mi, lo auténticamente fascinante del asunto, es que Higgs (y antes que él Anderson) predijeron la existencia del bosón de Higgs como mecanismo de generación de masa a partir del análisis de las simetrías que las interacciones que integran el Modelo Estándar deben satisfacer. Es el camino inverso al de Newton. Newton sintió la manzana caer sobre su cabeza, y de ahí se abstrajo hasta formular su Ley de la Gavitación. Higgs lo hizo al revés. A partir de propiedades matemáticas de las interacciones, formuló la necesidad de la existencia del bosón que lleva su nombre. (Estas propiedades se denominan simetrías; una simetría es una propiedad de las ecuaciones que describen la dinámica de un sistema físico en virtud de la cual las maginitudes observables permanecen invariantes frente a dicho cambio. Por ejemplo, las leyes de Newton son las mismas con independencia de que se las formule en Oxford o en Madrid; es decir, aunque traslademos el sistema de referencia, las leyes de Newton permancen invariantes).

En otros términos, la forma matemática de las ecuaciones determina en buena medida la dinámica del sistema físico descrito. ¿Qué nos dice esto? Pues nos dice que buena parte de la realidad es pura forma, que incluso el contenido material y dinámico del universo es forma.

Y en fin, no puedo evitarlo, nos dice que Platón tenía razón...

2012/07/15

La purga

El partido Popular en el gobierno está culminando una purga en toda la regla en RTVE. Al anterior gobierno se le pueden criticar muchas cosas, de hecho casi todas, pero cuenta en su haber con un mérito incuestionable: convirtió la radio-televisión pública en una plataforma abierta de información y entretenimiento. Por primera vez en nuestra democracia, pasamos de una RTVE de partido a una RTVE auténticamente plural.

El PP ha acabado con esto. Cambiaron la ley para permitir que la elección del presidente de "ente" se llevase a cabo en el parlamento por mayoría absoluta en vez de mayoría cualificada (creo recordar que de los 3/5 de la cámara). Nombraron un presidente del "ente" de su agrado... y los acontecimientos se han precipitado.

Primero fue la sustitución de Fran Llorente (recomiendo que se consulte en Internet la relación de premios nacionales e interbacionales recibidos por la calidad y pluralidad de los informativos de RTVE bajo su dirección) al frente de los informatvos, para sustituirlo por un periodista porcedente de... ¡Telemadrid! (toda una declaración de intenciones). Pepa Bueno salió. Y no esperamos volver a ver a Ana Pastor.

Sin embargo, a mí lo que más me está doliendo es lo que está ocurriendo en RNE. En casa somos "muy de radio", Escuchamos la radio por la mañana, en ocasiones a ratos sueltos por la tarde, en el coche en los viajes, y muchas veces en las mañanas de los fines de semana. Diría que en los últimos años años los diales de las radios familiares se han oxidado, porque siempre estuvieron situados en la frecuencia de Radio Nacional.

Juan Ramón Lucas nos ha ido seduciendo poco a poco, y hemos acabado queriéndole. Lucas es la honestidad, la cercanía, la bondad, la ecuanimidad. Ha dignificado la tarea de informar (y me imagino que de entretener, pero en esa "franja horaria" yo ya estoy trabajando). Ha sabido manejar como nadie el balance entre dar la voz a todos y permitir que la suya sonase, casi más de forma implícita que explícita. Ha ido hacendo crecer la audiencia de "En días como hoy" poco a poco, sin estridencias, sin amarillismos, con rigor. Irreparable pérdida.

Pepa Fernández es la número uno. Es la inteligencia, el sentido del humor, la palabra bien tratada, el gusto por rodearse de colaboradores de primer nivel (en contra de la tendencia de tantos a rodearse de mediocres), la imaginación, la alegría. Ha transformado las mañanas de los fines de semana de "los minutos basura" de la parrilla a un horario estelar. Cómo vamos a echarla de menos, y a Forges, y a Juan Carlos Ortega, y a Leontxo García, y a Íñigo/Pardo, y a Marina, y a ...

Toni Garrido... me gusta menos. Es ingeniosísimo, rápido, gracioso. Pero su ramalazo progre a la "Gran Wyoming" me resulta trasnochado y facilón... aún le recuerdo haciendo mofas a las torturas que John McCain sufrió en Vietnam... No le echaré tanto de menos.

En fin, habrá que volver a engrasar el dial. Julia (Otero), la única mancha de infidelidad a mi devoción por RNE, a tus manos encomiendo mi espíritu.

El PP no acaba de interiorizar que están en el gobierno "de prestado". No me malinterpreten. Su posición en el gobierno es totalmente legítima, además de legal. Pero Arriola aún no les ha explicado de forma suficientemente convincente que, para ganar, el PP necesita que la izquierda no se movilice del todo. Si la izquierda va toda ella a votar, y su voto está razonablemente concentrado, si la participación, en vez del 65% es del 78%, la izquierda gana las elecciones en España. España es de centro-izquierda.

Y, señores del PP, estas cosas que hacen ustedes nos movilizan. No podremos soportar de nuevo una RTVE exclusiva de Carlos Dávilas, Curris Valenzuelas, de inflitrados de Intereconomía, de la COPE, de ... unidimensional, casposa, manipuladora (a imagen y semejanza de Telemadrid). Vaya que si nos movilizaremos.

2012/07/10

El Síndrome de Salieri

Antonio Salieri es uno de los pesonajes de la historia moderna que más me llama la atención. Salieri fue un músico del periodo clasicista, contemporáneo de Mozart, instalado en la corte de José II en Viena como maestro de capilla y compositor. Salieri fue un músico reconocido en su tiempo, y contó entre sus alumnos a Beethoven y Schubert, nada más y nada menos. La relación entre Mozart y Salieri es el núcleo de la película Amadeus de Milos Forman, que narra la rivalidad entre los dos hombres. Aunque los historiadores rigurosos no dan demasiado crédito a tal rivalidad, a mi me interesa lo que la película revela; digamos que lo que cuenta Forman "si non è vero é ben trovato".

Salieri amaba la música con pasión. La música era toda su vida y a ella se consagraba. Vivía por y para la música. Salieri era, tal y como Forman lo describe, un monje de la música. Y, hasta que conoce a Mozart, Salieri se siente correspondido por la música. Para él, sus composiciones, sus conciertos y, sobre todo, sus óperas, que arranca a la musa con dificultad, son signos de la correspondenca que la música hace a su amor. Sus obras son la prueba tangible de que la música lo ama a él con la misma devoción, la misma pasión que él le profesa a ella.

Hasta que conoce a Mozart. Cuando Salieri escucha la música de Mozart, se da cuenta de que ésta se encuentra en otra dimensión, que la música de Mozart es excelsa, es divina, es perfecta. Dos sentimientos lo arrebatan de inmediato. Por una parte, la belleza de la música de Mozart lo lleva a un trance de arrobamiento ante lo nunca escuchado antes. Por el otro, toma conciencia de que la música se ha burlado de él, de que nunca le correspondió, de que lo que le regalaba a él eran meros arrumacos para pasar el tiempo, mientras su corazón, el corazón de la música, la pasión de la música eran para Mozart. Al impacto conjunto de estos dos sentimientos yo lo llamo el "síndrome Salieri".

Y lo peliagudo del asunto es que él, Antonio Salieri, amaba a la música tanto o más que Mozart. ¿Cómo era posible tamaña injusticia? ¿Cómo era posible que la música, a la que Salieri amaba con mayor devoción y pasión que el propio Mozart, decidiese escoger a éste para entregarle su amor?

¿Acaso no da el amor absoluto el derecho a ser correspondido?

No solo Salieri ha sufrido en la historia. ¡Cuántos matemáticos han dedicado su vida a la resolución de un problema, al que han cortejado y cortejado durante décadas, para asistir, padeciendo en el alma la punzada del Síndrome de Salieri, que otro, no siempre más dedicado, no siempre más delicado, es el agraciado al que la forma matemática se rendirá!

Gottlob Frege, el inventor de la lógica matemática moderna, es otro ejemplo. Cuando se disponía a publicar la segunda edición de sus Principios Básicos de la Aritmética, recibió una carta de Bertrand Russell en la que éste le comunicaba el descubrimiento de una profunda inconsistencia en su sistema. En lo que el propio Russell describió como el "mayor ejerccio de honestidad intelectual", Frege escribió en el prólogo de su libro lo siguiente: "Con nada más indeseable puede enfrentarse un científico que con deshacerse de sus fundamentos después de terminar su obra. Me ha puesto en esa situación una carta de Mr. Bertrand Russell cuando estaba a punto de mandar mi obra a la imprenta".

Y tantos, y tantos y tantos.

¿Por qué la belleza y la verdad son tan injustas, arbitrarias y caprichosas, y no corresponden a nuestro amor con un amor igual?

Ahh, menos mal que nos queda la vida.


2012/06/26

Hipocresía

Leo que el papa va a destituir al obispo argentino sorprendido en un idílico encuentro con una bella dama.
http://sociedad.elpais.com/sociedad/2012/06/26/actualidad/1340715063_823624.html

Para el papa es insoportable la idea de que un prelado de la iglesia católica mantenga una relación con una señora.

Es curioso. Muy poco dijo el fundador (Jesús de Nazaret) de forma directa al respecto. Mucho más explícito y contundente fue respecto de su opción por los pobres. En los evangelios se pueden encontrar decenas de citas sobre el tema, desde la mención en el Sermón de la Montaña hasta el famoso "es más fácil que entre un camello por el ojo de una aguja que un rico en el reino de los cielos".

Quizás el papa debería darse una vuelta por la modesta nunciatura apostólica en Buenos Aires (adjunto foto)






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¿Qué le causaría más escándalo a Jesús, el palacio del nuncio de su santidad en Buenos Aires o los devaneos amorosos del obispo?

¿En qué está pensando la iglesia?